domingo, 17 de abril de 2011

*Todas Mis Lluvias.



Intento encontrar la fórmula secreta, le llaman amor... Aquel que tuve a medias, venía y se iba, torbellino de pasiones. Ese amor que se pierde por no ser correcto, por esconderse de la luz, incomprendido y ya parchado, trastocado por muchos, fisgones de la calle que se vuelven jueces. Me arrebatan los sueños, en instantes me golpean, en mi caída me avergüenzo y luego, continúo soñando.. A la mezcla de todo esto yo le llamo mis lluvias, gotas gruesas y frías que llenan mi cara y humedecen todo lo que toco. Los días lluviosos como hoy son pesados y nutridos de decepción, me mantienen presa, en melancolía y soledad, la resignación se apodera de mis actos y va llenando el lago de olvido que ha germinado junto a mi habitación.
La lluvia es perenne, lenta, opaca mi visión, me mantiene en un estado de apatía,
sobre mí, una nube, sobre mí llueve, esas son mis propias lluvias. Mis propios miedos, mi melancolía y el tormento de haberle perdido.

En lluvia quisiera transfigurarme, lluvia quisiera ser. Entrar en los rincones de tu alma e invadir tu privacidad, si he de convertirme en lluvia, con ayuda del viento llegaré a ti, y si lluvia soy, verás que ocupo todo el espacio sideral, desde lo alto te podré observar.
Lluvia quisiera ser, llegar hasta ti, ocultar lágrimas, tener aroma, mezclarme con arena, rocas y vegetación y ser inspiración, porque no soy yo... Son las lluvias que escriben por mi.