domingo, 19 de septiembre de 2010

A tu muerte Hilda - - -

Con la muerte de mi vieja tía Hilda, recuerdo los añorados momentos a su lado, cuando brillaban mis ojos al observar su neta vitalidad, con el solo apretón de manos que te daba al saludar, notabas la fuerza y nobleza de su sano corazón - ni el tiempo hacía que perdiera las ganas, para ella la actividad y la risa diaria eran el mejor secreto para vivir 200 años...

Para aquellos años en los que ya tenía conciencia, visitar a la abuela era usanza dominguera, que sólo era placentera cuando ella hacía su luminosa aparición, quien no dejó de arrancarme ni un sólo día una sonrisa, junto a una entonada voz para el canto y un moderado vaivén de caderas demostró en todo momento el amor por lo bello, el amor por la vida.
Cuantos hermosos momentos, nutridos del mas tierno y dulce de los amores, ese amor que ofrecia con una entrega total y desinteresada.

Recuerdo los pequeños presentes que mi madre le regalaba, un par de aretes para ella era toda una mina de diamantes, sobretodo si eran largos y coquetos como a ella le gustaban, que hermosa mujer, cual espiritu llamaba a enamorar.
Ni el cáncer pudo contigo - hoy guardo los mejores momentos a tu lado Hildita! tus afectuosos y genuinos apretones, que me dejaban inquieta, tu templanza y bondad hicieron en ti la mejor madre, amiga y persona.

Aferrarse a la vida hasta el final!! ese era lema - me quedaré con tu rostro sin el paso de los años, con tu coqueta mirada y ese amor tan profundo por hacer mas amena la vida. Porque aún estás aquí y vives entre nosotros, las personas que te queremos lo sabemos, hasta tu ultimo suspiro, hasta tu último deseo, hasta la última palabra, hasta tu última mirada..

Esperare un tiempo para poder entender como estas cosas tocan el alma y un sentimiento inefable me carcome la mente, como si fuera la primera vez que alguien se me va, aunque hayan sido miles, como si junto a esto se le sumara mis fracasos amorosos y como si hechara ahora a la borda lo que pudo haberme hecho feliz en algún tiempo....

Recuerdas aquella canción que un día te dije que me gustaba? porque significaba mucho, afirmaste con la cabeza y tu mano rozó mi cara -
Si un día me faltas no seré nada y al mismo tiempo lo seré todo
porque en tus ojos están mis alas y está la orilla donde me ahogo!!!
Sigue Volando mi hermosa mamita.



Descanza en Paz Hildita